Yi Ching, respondió a su pregunta con el hexagrama número 50. Ting/El Caldero, con mutabilidad en las líneas 2ª y 3ª, y el correspondiente hexagrama complementario, número 35. Chin/El Progreso:

El hexagrama número 50. del Libro de las Mutaciones, denominado con el ideograma Ting/El Caldero, también linealmente configura al recipiente sacrificial que en la antigua China se utilizaba para elevar a la divinidad los mas refinados alimentos que el hombre podía condimentar. Por extensión, referencia respecto de la capacidad propiciadora de la más alta expresión cultural. "Elevada ventura. Éxito", dictamina.

Mediante la mutabilidad de su 2ª (línea) declara con franca modestia que contiene provisiones no susceptibles de ser alteradas por la envidia de compañeros circunstanciales.

Con la 3ª (línea), advierte de que no obstante la preciada grasa de faisán de su contenido, éste no será degustado de inmediato. Y, prosigue, que ello es debido a circunstancial extravío de los hombres, en el exterior; pero en que en cuanto la gradual fuerza del retorno haga volver a éstos sobre sí llegaran también las aguas, y será comido el rico alimento.